SAN BLAS, UN SANTO "CARALLEIRO Y BORRACHÓN"

Fe, devoción, juerga y gastronomía van de la mano en Bembrive en la celebración de la festividad de San Blas: una de las romerías más populares de Vigo. El buen tiempo y que coincida en víspera de fin de semana propician que se registre una afluencia de decenas de miles de devotos, de este abogado de los males de la garganta y patrón de los laringólogos.
Con el despuntar del día aparecen los primeros fieles en la iglesia parroquial, donde desde las ocho y media de la mañana se ofician actos litúrgicos, siguiendo un ritual que en Bembrive se remonta al siglo XVII. Con la misa solemne, a partir de las doce y media, el atrio y los alrededores del templo ya están atestados de gente deseosa de compartir una jornada festiva. La megafonía recoge la totalidad del oficio religioso, durante el cual se recuerda la vida y milagros de este santo de origen armenio, al que en Bembrive se le recuerda como una de las primeras romerías viguesas del año.

Al mediodía son muchos los devotos de esta fiesta de San Blas que van ataviados con sombrero o boina, el tradicional pañuelo atado al cuello y la cunca de barro sujeta con un cordel. Los furanchos, comienzan a despachar las primeras tazas de vino y las típicas tapas de cacheira y de chorizo. El santo, acompañado de la imagen de Santiago Apóstol y de la banda de música, sale en procesión sobre las 13.30. Es una cita ineludible para muchos vigueses y viguesas, pues durante casi 24 horas en todos los furanchos, bares, restaurantes y casas particulares, se canta y se bebe hasta la extenuación.
Las peñas recorren todo el pueblo con cánticos populares. Hay peñas de mujeres y de hombres, ¡nunca mixtas!, la fusión se hace en plena celebración y con unos cuantos tragos de vino en el cuerpo.

Por todo lo expuesto anteriormente, se puede afirmar y afirmo, que San Blas es un Santo "Caralleiro y Borrachón."




Leopoldo Mosquera( Presidente 2º fundador)